• Evalúa tu nivel de Inglés para fijarte una meta.

• Planifica tu tiempo de estudio para conseguir tus objetivos.

• Practica el idioma a diario incluyéndolo en tus actividades.

Año Nuevo, ¡propósitos nuevos!... ¿o no tan nuevos? Seguro que ya has empezado a preparar tu lista de propósitos y bien sabes que dominar el inglés es un punto recurrente en esa lista pero, ¿cómo vas a conseguir esto en la práctica este 2018? ¿Cómo vas a asegurarte de que tu objetivo con el inglés no se quede perdido en el camino junto a tu rutina de gimnasio? Necesitas un plan.

Planifícalo

“Seré fluido en inglés este año” suena genial, y seguro te motiva el simple hecho de pensarlo pero, ¿no parece un poco vago e irreal? El final de 2018 está demasiado lejos y, si no te marcas hitos intermedios durante todo el año, fácilmente acontecimientos de tu vida diaria se interpondrán en tu camino y tu propósito con el inglés seguirá siendo un sueño. ¿Hasta dónde quieres llegar antes del verano? ¿Y en 3 meses? ¿Y al final de la primera semana?

Si te mantienes en ese ritmo de progreso, incluso un principiante total podría llegar a un nivel avanzado antes de fin de año. Establece metas medibles y alcanzables para cada trimestre y márcalas en un calendario anual, que debes tener en un lugar siempre visible.